¿Cómo está tu salud mental?
Nuestras rutinas continúan alteradas por la pandemia ocasionada por el COVID-19. Todavía no hay una fecha exacta para volver a clases, salir con amigos y vivir las experiencias con mayor libertad. El auto-confinamiento y, sobre todo, el distanciamiento social se ha extendido sin fecha de expiración. El último año se nos ha pedido, de forma repetitiva, que nos quedemos en casa, que no veamos gente, y que esperemos pacientemente.
Estas instrucciones ocasionan incertidumbre y miedo. Pero también generan estrés, enojo, ansiedad, desmotivación y preocupación por el futuro. Sensaciones que poco a poco alteran nuestra salud mental.
Expertos reconocen que lo que está ocurriendo genera un impacto en el estado emocional de una generación entera. “Estamos viviendo la mayor angustia psicológica compartida desde la Segunda Guerra Mundial”, señalan Benjamin Perks y Zeinab Hijazi, autores del libro 'El tiempo para una revolución de la salud mental infantil es ahora'. Ellos saben que el tema aún es tabú para muchos de nosotros, lo que dificulta trabajar en la salud mental de adolescentes y jóvenes.
Una encuesta realizada por U-Report -a adolescentes y jóvenes de América Latina y el Caribe-, detectó que un 73% de esta población reconoce que necesita ayuda para mejorar su estado físico y emocional. A pesar de ello, el 40% acepta que no ha pedido ayuda.
En Internet de las cosas buenas ponemos a disposición algunas dinámicas y actividades que serán útiles para cuidar de la salud mental. Sabemos que esta etapa es difícil, pero hay algunas recomendaciones. Los expertos aconsejan que separemos los hechos que nos acontecen en dos: entre las cosas que se pueden controlar y otras que están fuera de nuestro control. Así, evitamos fatiga mental, pendando en aquellas cosas que no dependen de nosotros.
También existe el servicio de ayuda psicológica Psicoescucha PUCE del Centro de Psicología Aplicada de la Facultad de Psicología de la Universidad Católica. Llama al 022991779 o al 022991780, de 10:00 a 19:00, para solicitar atención cuando necesites conversar con alguien.